Las hierbas de Miguel


MARRUBIO(Marrubium bulgare)
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El invierno es un periodo en el que con frecuencia nos vemos afectados, en mayor o menor medida, por las afecciones catarrales y gripes que nos provocan trastornos respiratorios a las personas de todas las edades. La sabiduría popular nos dice con acierto que los resfriados hay que pasarlos guardando reposo y manteniendo el organismo bien hidratado, y para que sea más fácil depurar el organismo a través de la piel y el moco. Afortunadamente, la naturaleza nos brinda la posibilidad de tratar distintas enfermedades a través de distintas plantas medicinales, y en el caso de las vías respiratorias, las plantas son numerosas: para calmar la tos, sudoríficas, emolientes o mucilaginosas para favorecer la expulsión del moco. El marrubio es una de ellas, y se considera un buen remedio contra la tos.
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Parece ser que el nombre científico de Marrubium deriva del hebreo "Mar", que significa amargo y "Rob", jugo, dado su particular sabor amargo. Se trata de una planta vivaz que crece en forma de mata. Tiene numerosos tallos angulosos, simples o un poco ramosos; las hojas son opuestas, blanquecinas y de forma redondeada; las flores son blancas y se agrupan en gran número en las axilas de las hojas superiores. Es una planta muy vellosa que despide un olor característico, parecido al aroma de una manzana.La planta es originaria de Europa meridional y suele crecer espontáneamente en lugares abandonados, bordes de caminos, al pie de muros, entre los escombros, etc. En España se la puede encontrar por toda la Península y en las islas Baleares.
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Al igual que ocurre con la ortiga, es una planta muy abundante en Alcublas y totalmente despreciada por su aspecto y para muchos también por su olor, desconociéndose, por lo general, sus propiedades medicinales
Son las sumidades floridas las que concentran en mayor proporción los principios activos de la planta que la convierten en un eficaz remedio contra las afecciones respiratorias. El principio activo está constituido por la marrubiína. Además, abundan otros componentes como marrubiol, peregrinol, vulgarol, flavonoides, taninos, mucílagos, sales minerales como el hierro y el potasio, así como vitamina C. Los principios amargos del marrubio le confieren las propiedades digestivas y estimulantes de la vesícula biliar.
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Por sus propiedades antitusígenas es una planta especialmente indicada para tratar los resfriados, bronquitis, ataques agudos de asma, y sobretodo, todas aquellas afecciones respiratorias acompañadas de tos, ya que hace más fluidas las secreciones bronquiales. Además, el marrubio estimula el apetito que normalmente se pierde cuando se está resfriado y desganado. Por sus propiedades digestivas se puede combinar con otras plantas para tratar dispepsias, flatulencia, vesícula e hígado perezoso, indigestiones, etc.
En animales de experimentación, el marrubio ha demostrado actividad uterogénica y efecto abortivo por lo que, por prudencia, se desaconseja su consumo durante la gestación.
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La hierba florece en mayo, extendiéndose hasta bien entrado el verano. De la recolección interesan sobre todo las hojas y sumidades floridas, que se cortan a mano en plena floración. Esta operación se puede repetir varias veces dentro de un mismo período. Una vez recogida, se secan los tallos en capas finas, a la sombra y en lugar bien aireado.
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Las formas de uso más frecuentes son:
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1. En infusión, preparada a partir de dos cucharaditas de tallos secos en una taza de agua. Es una planta respiratoria por lo que combina especialmente bien con plantas como el tusílago, saúco, tomillo, malvavisco, gordolobo, malva, pulmonaria, llantén y eucalipto.
2. También se puede hacer con él un vino medicinal: en un litro de buen vino se deja macerar durante una semana una pequeña cantidad de sumidades floridas y después se filtra.
3. Baño de marrubio: en 6 litros de agua se pone a hervir 1 kg de sumidades de marrubio; se deja hervir 5 minutos, se cuela y se añade a una bañera ya preparada. Para los niños, el marrubio resulta muy útil como remedio contra la tos infantil, Es importante repetir la misma operación durante dos o tres días para comprobar como la tos va remitiendo.
4. El zumo de la planta fresca mezclada con miel también es una opción interesante.
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En definitiva, el marrubio es la planta del bienestar respiratorio, y además la tenemos muy a mano: menos pastillas, jarabes y “sobrecitos”…

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